Martes 29 de abril de 2025
El Tribunal Supremo Electoral (TSE) de Bolivia ha rechazado el congreso del oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) que tuvo lugar entre el 3 y 5 de mayo en la ciudad de El Alto, cercana a La Paz. Esta reunión, promovida por organizaciones afines al Gobierno de Luis Arce, buscaba relegar al expresidente Evo Morales y elegir a Grover García como nuevo presidente del partido. Sin embargo, el TSE determinó que dicho congreso no cumplió con el estatuto del MAS, ya que no se llevaron a cabo procedimientos requeridos en ausencia de Morales, como la posesión de la comisión de poderes y el ‘presidium’, y no se cumplieron los requisitos para aquellos elegidos.
Según el vicepresidente del TSE, Francisco Vargas, la resolución de 2017 que designa a Evo Morales como líder del MAS sigue vigente, lo que significa que se mantiene en su posición dentro del partido político.
El distanciamiento entre Arce y Morales ha sido evidente desde el año 2021, y se profundizó aún más el año pasado con la realización de un congreso nacional del partido en ausencia del presidente Arce y sus seguidores, donde Morales fue ratificado como líder y nombrado «candidato único» para las elecciones de 2025. La tensión entre ambas facciones se agravó aún más después de que el TSE anulara el congreso de 2023 y pidiera uno nuevo consensuado, sin que ambas partes oficialistas llegaran a un acuerdo al respecto.
El bloque que respalda a Morales ha convocado a su propio congreso del partido para el 10 de julio en Villa Tunari, en el Trópico de Cochabamba, principal bastión político y sindical del exmandatario.