Viernes 24 de enero de 2025
Alex Batty, ahora con 17 años, fue localizado después de haberse ido de vacaciones con su madre en España. Según su relato, estuvo vagando por Francia durante dos años.
En 2017, Alex, un niño británico de 11 años, desapareció durante unas vacaciones en Málaga, España, con su madre y su abuelo. Su abuela, Susan Caruana, lo buscó al sospechar que su madre, Melanie Batty, lo había llevado para unirse a una secta.
Esta semana, las autoridades británicas informaron sobre el hallazgo del niño en Toulouse, Francia. Alex, que ahora tiene 17 años, fue avistado caminando solo por un conductor que se preocupó y lo llevó a una comisaría. Allí, afirmó que se había escapado de una supuesta comunidad espiritual.
Aunque no se revelaron todos los detalles de sus movimientos desde su desaparición, el joven declaró que estuvo al menos dos años en dicho país y que, tras someterse a una revisión médica, confirmaron que “no recibió malos tratos”.